Y mi texto de palabras raras:
"Como el añal se alaciaba, el pastor azaraba y descogía sus cepillos para peinarlo. Sus tijeras pavonadas le servían para preparar el cáñamo antes de enriarlo, cortar el huautli y podar los quillayes que ya habían fruteado. El único espectador era un pavón que parecía reír con su canto peculiar. El pastor no le ponía cuidado."
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