30 de septiembre de 2024
Nigel Richards ahora en español
13 de marzo de 2024
13 de noviembre de 2022
Horacio y su estado de scrabble permanente
7 de septiembre de 2020
Nigel Richards - Memoria Fotográfica
Fotos de archivo: Mundial Lille 2016 -Derecha: Enric Hernández con Nigel Richards. Izquierda: Joana Rubio, Nigel Richards y Alicia Acosta.
Escrito por: Javier Jiménez @dronte
"Nigel Richards es el mejor jugador de Scrabble de todos los tiempos, sin duda alguna". Eso defendía el periodista Stefan Fatsis, uno de los grandes conocedores del submundo del Scrabble de competición, en la NPR hace unos años. Y, a juzgar por el palmarés de Richards, razón no le falta. Ha ganado el Campeonato del Mundo en inglés en 2007, 2011, 2013, 2018 y 2019. Es, de hecho, la única persona que ha ganado el concurso más de una vez. Además, ha ganado cinco veces la liga norteamericana; ocho, la británica; once, el Open de Singapur y trece, la Copa del Rey de Bangkok.
Sin embargo, en 2015 se aburrió. Se compró el diccionario de Scrabble de francés y memorizó sus 386.000 palabras en nueve semanas. Ese mismo año se proclamó también campeón del mundo del juego de mesa en lengua francesa venciendo a auténticos maestros del juego provenientes de Francia, Canadá, Bélgica y el África francoparlante.
La de Nigel Richards, neozelandés nacido en el 67, es una mente fascinante. Sin embargo, no se prodiga demasiado por los medios de comunicación. Quizás la mejor descripción de su método de trabajo venga, precisamente, del propio Fatsis: "Básicamente, lo que hace es mirar listados de palabras y páginas del diccionario. [La clave es que] puede evocar la imagen de lo que ha visto. El mismo dice que escuchar una palabra no es suficiente para pegarla a su cerebro. Pero que si la ve una sola vez, es suficiente para recordar la imagen. No sé si es memoria fotográfica; creo que es algo que la química de su cerebro le permite hacer".
Está claro que el Scrabble no es solo un juego de recordar palabras. Es un juego de estrategia: a nivel profesional, no solo se trata de puntuar más que el rival, también es esencial impedir que el rival pueda hacer más puntos que tú jugando con los espacios y las palabras escogidas. No obstante, lo que cuenta Fatsis deja una pregunta encima de la mesa... ¿existe realmente eso de la memoria fotográfica?
Leer más sobre la memoria fotográfica, en el artículo original: pulsando aquí
En muchos aspectos, la memoria sigue siendo un enorme misterio en el que influyen genética, desarrollo neurocognitivo y experiencias de aprendizaje. La "memoria fotográfica" también lo es. Por eso, verla aparecer con todo su potencial en sitios tan extraños como un concurso de Scrabble es algo realmente maravilloso.
Imagen | John Benitez
6 de febrero de 2019
Tablero en hebreo
Escribe Raz Naot:
Hola desde Israel!
Este es mi tablero hebreo, con autógrafo del famoso
Nigel Richards 😲💪🏆
20 de enero de 2019
El Mundo Scrabble - LaVoz
El juego, que tendrá su lugar en el Congreso de la Lengua, es practicado por millones de persona en el mundo. Según los psicólogos, sirve para afianzar la memoria semántica.
Ilustraciones de Karlo Lottersberger.
Domingo 20 de enero de 2019 - 10:00
Si te gusta jugar con las palabras, si te aburriste de ganarles a tus hermanos, a tus primos y a tu abuela en el tablero del Scrabble, si con las fichas L, A, I, E, R, G, A, podés formar los vocablos “alegría”, “alergia”, “aligera”, “argelia”, “galería”, “legaría”, “regalía”, te tengo una mala noticia: no sos un genio.
El test para comprobarlo puede ser humillante. Entrá a cualquier sitio de internet donde se juegue Scrabble y es muy probable que abandones la partida antes de desarrollar un complejo de inferioridad irreversible.
En un artículo sobre el enfrentamiento entre Karpov y Kasparov por el título mundial de ajedrez, el escritor Martin Amis dice que “en ningún deporte, quizás en ninguna actividad humana, es tan astronómico el abismo que separa al aficionado del experto”. Una sensación parecida produce enfrentarse a un verdadero jugador de Scrabble.
Un ejemplo extremo: el neozelandés Nigel Richards, último campeón del mundo de la disciplina en inglés, también se consagró en francés en 2015, sin saber pronunciar una sola palabra de ese idioma. ¿Cómo lo hizo? Memorizó el diccionario en nueve semanas y ganó con el vocablo de siete letras “fureter” (husmear).
Pero lo interesante es que a diferencia del ajedrez o del Go, cuyos jugadores alcanzan su plenitud entre los 20 y los 40 años (Magnus Carlsen tiene 28 y Lee Sedol, 35), Richards ya superó los 50; el argentino Luis Picciochi, tricampeón mundial en español, tiene 44 años, y el también argentino Horacio Moavro, último campeón austral y primer ganador del programa televisivo Pasapalabra, 61. Es decir que hay tiempo para practicar y mejorar hasta la tercera edad.
En el Congreso
Justamente porque se trata de un juego en que las palabras desempeñan un rol esencial, no es raro que el Scrabble tenga su espacio en el Festival de la Palabra que precederá al Congreso de Lengua en Córdoba a fines de marzo. El lunes 25 y el martes 26 de ese mes habrá dos eventos vinculados con el juego.
El primer día será teórico, con charlas de docentes y de jugadores expertos, quienes disertarán sobre los beneficios del Scrabble para la agilidad mental y la educación. El segundo día será práctico. Se montará un tablero gigante y competirán dos equipos de 25 integrantes cada uno, coordinados por un especialista.
El Scrabble es considerado un deporte de la mente. Para jugarlo en el nivel de los expertos, hace falta un conocimiento minucioso del vocabulario y una cierta habilidad estratégica para ubicar las palabras en las casillas más convenientes. El término “zoo”, por ejemplo, puede valer sólo 12 puntos (10 por la Z y uno por cada O) o 36 si una de sus letras ocupa el casillero rojo que triplica el valor de la palabra.
Hoy es posible jugarlo en un tablero tradicional o de forma virtual, ya sea ante la inteligencia artificial o ante otros jugadores en red. Hay varias apps disponibles, pero los derechos de Scrabble en español pertenecen a Mattel y está disponible en Google Play. Permite compartir los resultados y las palabras de mayor puntaje en Facebook.
Pasión mundial
Según un artículo de la BBC, publicado en ocasión del 70° aniversario de la creación de Scrabble, en diciembre de 2018, ya se han vendido más de 170 millones de unidades del juego de mesa en 120 países y hay versiones en 29 idiomas.
En realidad, el invento del arquitecto neoyorquino Alfred Butts data de 1938, pero el formato definitivo llegó 10 años después, en 1948, aunque recién en 1952 empezó a ser rentable, de la mano del emprendedor James Brunot y del presidente de la cadena Macy’s, que decidió exhibirlos y venderlos en sus locales
En Estados Unidos y en Inglaterra, despierta tantas pasiones que incluso hay medios, como The Guardian o The New York Times, que le dedican una sección fija en sus páginas, con artículos sobre campeonatos y entrevistas a jugadores. Un periodista deportivo de The Wall Street Journal, Stefan Fatsis, escribió un libro clásico sobre el tema, Word Freaks (Locos por las palabras), en el que entre otras cosas cuenta cómo luego de cubrir un festival de Scrabble pasó de ser un jugador hogareño a un experto con ranking en la National Scrabble Asociation de los Estados Unidos.
Almacén semántico
La Argentina cuenta con algunos de los mejores jugadores en nuestro idioma. En el ranking de la Federación Internacional de Scrabble en Español (Fise), tres argentinos figuran entre los cinco primeros. Sin embargo, el juego no está muy extendido entre los jóvenes y los adolescentes, como si fuera una diversión de otra época, destinada a una generación de nerds anterior a los videojuegos.
Por ese motivo, Horacio Moavro, que además de gran jugador es dirigente de la Asociación Argentina y de la FISE, opina que el Congreso de la Lengua es un espacio ideal para que más gente se sume a los amantes del juego en el país. De todos modos, es cierto que como actividad social parece perfecta para personas de cierta edad, con tiempo para dedicarse a estudiar el diccionario y a pasar horas frente a un tablero.
La psicóloga Laura Manoiloff, directora del Equipo de Investigación de Psicología Cognitiva del Lenguaje y Psicolingüística de la Universidad Nacional de Córdoba, afirma que juegos como el Scrabble y los crucigramas sirven para afianzar la memoria semántica. “Memoria semántica es el conocimiento que tenemos sobre el mundo, que se va incrementando con la edad”, explica.
Ahí está la causa de que los mejores jugadores de Scrabble superen los 40 años. “A los 50 –dice Manoiloff– uno llega a un buen nivel, sobre todo la gente con acervo cultural y que lee bastante. Eso hace que el almacén semántico pueda ser mucho más rico que en un joven”. Es probable que a los 50 empiece el declive en algunas funciones, pero el almacén semántico se engrosa.
No obstante, la psicóloga subraya que tanto los crucigramas como el Scrabble tienen que generarle un esfuerzo a la persona, porque si siempre se mantiene en el mismo nivel, no implica un desafío para la mente.
En la mente de un experto
¿Qué significa un desafío para la mente? Tal vez la historia de Horacio Moavro sirva de respuesta. Tiene 61 años, es contador público, lo que le ha permitido cierta flexibilidad en los horarios para dedicarse al juego. En la página de la FISE, figura en el puesto 22° del ranking, con 2.191 puntos de ELO (sistema de clasificación adoptado del ajedrez).
Recuerda perfectamente cuándo empezó a jugar: un domingo de lluvia, cuando tenía 10 años, con su abuela y su tía como rivales. Años después, ya adolescente, en las vacaciones que pasaba con su familia en Miramar, se juntaba con un grupo de chicos que preferían encerrarse en una habitación frente a un tablero de Scrabble antes que cualquier otra clase de diversión que pudiera ofrecerles la playa.
El padre de uno de esos chicos, que a veces asomaba la cabeza sobre las fichas y les sugería alguna jugada mejor, fue el primer guía de Moavro en su viaje a los tesoros escondidos del Scrabble. Lo escuchó y se dejó ayudar por él. El resultado: ya no pudo volver a jugar con su familia. Sin embargo, pasaron más de dos décadas antes de que compitiera en un campeonato. Un día de 1998, vio un afiche en Rosario que anunciaba “Próximo sábado, torneo de Scrabble”. Y ahí, su vida cambió.
En la lista de consejos de Moavro a quien quiera jugar en serio, figura en primer lugar el ejercicio de memorización. Hay que conocer todas las palabras de dos letras en español (88 en total) y todas las de tres letras (más de 380). Por ejemplo, ‘pchs’ (deletrea: “pe, ce hache, ese”) es el único vocablo en español que no tiene vocales. En la vigésima segunda edición del Diccionario de la Real Academia Española, el término aparece entre “pazpuerca” y “pe”, y su acepción es “interjección para denotar indiferencia, displicencia o reserva”. No se tomen el trabajo de buscar “shhh”. No figura.
En la mente
Moavro calcula que, entre el estudio del vocabulario y las partidas, le dedica un par de horas diarias al Scrabble, aunque en su mente las palabras siempre están dando vueltas, componiéndose y descomponiéndose, como si tuvieran vida propia.
Esa íntima obsesión de los jugadores de Scrabble puede provocar algún que otro malentendido.
Moavro cuenta que una señora ya grande, “a la que le temblaba la mano, pero la cabeza nada”, se había citado con un caballero en un bar frente a una librería.
La dama no podía concentrarse en la conversación y cada tanto sus ojos se desviaban hacia la vidriera de la librería en cuyo cartel se leía el nombre del local. No podía evitarlo: por más esfuerzo que hiciera su cabeza seguía buscando un anagrama de “Cúspide”. Movía las letras, cambiaba de lugar las sílabas, las acomodaba de distintos modos, hasta que de pronto pegó un grito que espantó al caballero: “¡Escupid!”. Siete letras, Scrabble, 50 puntos extra.
El texto original de este artículo fue publicado el 20/01/2019 en nuestra edición impresa.
31 de octubre de 2018
Nigel Richards por cuarta vez es el Campeonato Mundial de Scrabble
‘Groutier’: la palabra que ha permitido a Nigel Richards ganar por cuarta vez el campeonato mundial de Scrabble
El neozelandés ha conquistado también la versión en francés del juego en dos ocasiones, la primera en 2015 sin saber hablar ese idioma.
El campeón mundial de Scrabble, Nigel Richards, muestra el tablero que le dio la victoria en la final del torneo celebrada el pasado domingo en Londres. GETTY IMAGES / VÍDEO: REUTERS (al final del texto)
El neozelandés Nigel Richards sigue rompiendo récords en el mundo del Scrabble, un juego con 70 años de historia que se vende en más de un centenar de países y una treintena de idiomas. Richards, de 51 años, acaba de proclamarse vencedor por cuarta vez en su versión en inglés, en un campeonato celebrado el pasado domingo en Londres.
Una de las palabras que le permitió hacerse con el triunfo fue groutier, que significa taciturno o malhumorado. Gracias a ella, Richards sumó 68 puntos dejando el marcador final en 572 a 450. El californiano Jesse Day quedó en segunda posición y aseguró que había sido “un gran privilegio competir con el mejor jugador de todos los tiempos”.
Un reconocimiento que comparten muchos jugadores profesionales y que el neozelandés se ha ganado a pulso desde que, hace 11 años, comenzó a disputar torneos de Scrabble. En el actual, Richards ha vuelto a ganar el campeonato en su versión en francés, hazaña que ya consiguió en 2015 sin hablar la lengua de Molière.
En aquella ocasión una amiga del jugador contó a un diario local que “Richards desconocía lo que significan las palabras y no podría mantener una conversación [en ese idioma]”. El tetracampeón mundial, ganador también en las ediciones de 2007, 2011 y 2013, ha asegurado que “memorizó el diccionario de Scrabble en francés en tan solo nueve semanas”. La palabra que le dio la victoria en aquel torneo fue el verbo "fureter" (fisgonear).
Richards empezó a interesarse por el Scrabble a los 28 años. "Cuando aprendió a hablar no estaba interesado en las palabras, solo en los números", recuerda su madre, Adrienne Fischer, que le descubrió el juego: “Relacionaba todo con los números. Lo veíamos normal. Nigel era Nigel”. De hecho, Fischer nunca creyó en el éxito de su hijo, porque en la escuela “no era bueno ni en ortografía ni en inglés”.
Su habilidad innata con el Scrabble podría basarse en la memoria fotográfica y en técnicas matemáticas. Huraño y poco hablador, Richards tiende a rehuir las entrevistas y ni siquiera su madre conoce qué trabajo tiene en Malasia, donde reside actualmente. Unir palabras sigue siendo su pasión: ha ganado 2.758 de las 3.600 partidas disputadas en el circuito profesional.
Muchos contrincantes lo definen como “una computadora de barba pelirroja”. Richards tendrá ahora que pensar qué hacer con los 20.000 dólares (unos 18.000 euros al cambio) que se metió en el bolsillo por ser el mejor del último torneo.
Pueden ver un video corto, pulsando aquí
Todo fue tomado de: El País
28 de agosto de 2016
22 de julio de 2015
Todo el mundo a dejarse crecer la barba
"El campeonato mundial del popular juego de palabras Scrabble para la lengua francesa fue ganado por un neozelandés que no habla una palabra de ese idioma.
Nigel Richards venció en la final celebrada el lunes en Lovaina, Bélgica, por 2-0 a Schélick Ilagou Rekawe, de Gabón, quien ya había sido finalista en 2014.
Richards, considerado uno de los mejores jugadores del mundo de juegos de mesa de palabras, venció a rivales de Francia, Bélgica, Canadá y países del África francófona hasta convertirse en el campeón de la edición 44 del mundial de Scrabble en francés.
De memoria
Según el canal de noticias France 24, Richards se aprendió de memoria todo el diccionario francés de Scrabble, de más 200.000 palabras, en nueve semanas.
Y sin necesidad de saber cómo pronunciar las palabras ni de conocer su significado.
Scrabble
El scrabble es un juego de mesa en el que los jugadores deben armar palabras sobre un tablero para sumar puntos.
Pero esta no es la primera vez que el hombre gana un mundial de Scrabble.
En 2007 y 2011 se coronó campeón de los mundiales de Scrabble de lengua inglesa, su lengua materna. También ostenta cinco campeonatos en Estados Unidos.
"Felicidades Nigel, eres increíble", escribió la Federación Francesa de Scrabble en su página web.
Richards también fue ovacionado por los asistentes a la final."
Tomado de: BBC
Gracias a: Adriana Cuervo
21 de julio de 2015
15 de noviembre de 2007
Mumbai 2007
Anunciando el itinerario de estos tres días de gran espectáculo, Sanjay Luthra, director administrativo de Mattel Toys dijo: "Scrabble(R) significa que 'cada palabra cuenta', lo que ilustra la personalidad competitiva y divertida del Scrabble(R) y el grado en que los jugadores se implican en el juego. Estamos muy contentos con la oportunidad ofrecida por la India de celebrar el Campeonato Mundial de Scrabble(R) por primera vez y sentimos que esto llevará al juego número uno de la India a un nivel aún superior".