Dos temporadas compitiendo y Luis Alonso se ha labrado un nombre en el Circuito español. Jugador de La Didáctica Scrabble Atriles de Madrid, en su primer año sus puntos dieron títulos a su club; en el segundo, sumó su primer podio individual, mientras acumulaba más partidas que nadie. Reflexivo y afable, es el ejemplo del contrincante ideal. Lo podrán comprobar en el Mundial.
¿Cuándo empezaste a jugar y cómo?
Exceptuando unas pocas partidas que jugué de niño, comencé a jugar en internet hará cerca de veinte años. Rápidamente me aficioné a estas partidas on-line, pero no fue hasta hace un par de años que, digamos, por azar, me animé a jugar con los compañeros de Atriles, entonces en el Hostal Persal. Coincidí con Carlos Puente -gran artista dentro y fuera del tablero- en la galería de la también jugadora Clara Tengonoff y empezamos a jugar. Al poco, me insistió en que me pasara por el Persal, sede de tantos eventos de scrabble, y allí empezó todo.
¿Cómo te definirías jugando?
Un jugador reflexivo (provengo del mundo del ajedrez), a veces en exceso, fruto muchas veces de grandes dudas y, todavía y quién sabe por cuánto tiempo, con falta de estudio serio del vocabulario.
La mejor y peor virtud en los tableros
Mi mejor virtud es que soy un jugador calmado (lo soy, en general, en la vida). Mi mayor defecto radica en la falta de conocimiento de vocabulario, como ya he dicho. Además, siento especialmente que estoy muy lejos de saber cómo afrontar una partida en desventaja y tratar de remontarla. Me falta eso y mil cosas más, esa es la verdad.
Dos temporadas en el Circuito español y en esta última reivindicándose con amplia proyección ¿Cuál es el secreto de tal progresión?
Nuestro club congrega un elenco de jugadores muy fuertes y es fácil aprender -hasta donde uno alcance- de ellos. La asistencia regular a las partidas de los jueves y la presencia activa en los torneos del circuito han dado cierto fruto, tampoco nada extraordinario.
Inexorablemente hablar del Club Atriles se relaciona con un equipo de jugadores dominantes de la actualidad del scrabble español durante los últimos años ¿Cuál es el secreto del nivel de los atrileros en la competición? Creo que el entusiasmo con el que abordamos cada una de las competiciones del circuito, unido al hecho de que un buen número de los integrantes con los que tengo la suerte de coincidir en Atriles son jugadores de notable fuerza, han conducido a este momento dulce en lo deportivo.
Está temporada has destacado como el jugador con más partidas y torneos disputados, prácticamente en toda la geografía española. Distintos clubes, distintos jugadores. ¿Has apreciado características o hábitos de juego particulares entre unos y otros?, ¿a cuál te acomodas mejor?
El buen ambiente que advertí ya en mi primer torneo completado (Argamasilla de Alba 2023) me animó a participar en la mayor parte de las citas del circuito durante la pasada campaña. Curiosamente, falté a nuestro torneo en Madrid en el mes de febrero por motivos de salud. En cuanto al resto, disfruté de todas las visitas y traté de aprender lo que pude de unos y de otras. Hay estilos de juego que me van más, pero trato de acomodarme a lo que surja sobre el tablero en cada momento.
Si el scrabble tiene parte de estrategia, suerte, vocabulario y psicología ¿en cual de estas opciones confías más en las competiciones?
Al amparo de unas condiciones psicológicas favorables (juego despreocupadamente con cualquier oponente, no me dejo afectar en exceso por una derrota incluso cuando, como sucede a menudo, es resultado de un error grave propio…), trato de ir dominando, poco a poco, el factor estratégico del juego, mantener atriles compensados, sumar lo que se pueda en cada jugada… Creo que la suerte es un factor muy secundario si tomamos una perspectiva amplia.
Existe un lamento tradicional acerca de la “suerte” que acompaña a los jugadores más fuertes, los campeones. Después la realidad, terca, demuestra que siempre están arriba los mismos. Son los que han estudiado con dedicación, que poseen, desde luego, una habilidad innata para anagramar y calcular, un vocabulario ingente… Más allá de la anecdótica suerte que te puede llevar a ganar “una” partida con un jugador más fuerte, lo cierto es que la clave está en el estudio. La suerte te da alguna alegría y, del mismo modo, algún pequeño disgusto.
Eres el actual presidente de tu club que va a afrontar un cambio de sede, de denominación y la organización de un Torneo Nacional. ¿Puede suponer un salto significativo para el club?.
Atravesamos un momento de cambio que, puede afirmarse ya, va a resultar positivo para nuestro club. Estamos trabajando intensamente en atender posibles nuevas incorporaciones, cuestión nada sencilla, como todos sabemos. La organización del Torneo Nacional en Madrid no es una cuestión menor. Avanzamos con gran ilusión para tratar de ofrecer unas jornadas de competición y camaradería a la altura de un campeonato de ese nivel y relevancia.
El scrabble es más que un juego. ¿Cuál es la razón que acabó por decantarte por su práctica?
Me gustan los juegos de estrategia y, tras muchos años compitiendo en ajedrez, me animé a hacer lo propio en scrabble. Ha sido un verdadero acierto, fui acogido con cariño por los jugadores del circuito y he disfrutado de cada una de las partidas que he disputado, con distinta suerte, pero siempre procurando que resulten provechosas.
Gracias por brindarme esta oportunidad, ha sido un placer atenderte.
Gracias por la entrevista.. un verdadero placer.